Síndrome Postrombótico
El SPT se debe a la hipertensión venosa
que se produce como consecuencia de la
recanalización de trombos venosos, lo
que ocasiona que las válvulas del
sistema venoso estén insuficientes o
incompetentes.
A causa de estos trastornos, se produce
una alteración del bombeo muscular que
produce un aumento de la presión de las
venas profundas y por ello hay
sufrimiento de los tejidos, edema y su
forma mas grave, la ulcera de origen
venoso.
Las manifestaciones del SPT son: el
dolor de piernas, la pigmentación, la
induración de la piel (celulitis
indurativa- semejante al cartón) alrededor del tobillo en el
1/3 inferior de la pierna.
De suma importancia el diagnóstico de
certeza y el tratamiento adecuado en
cada caso en particular.
Linfangitis
Es un cuadro agudo, que comienza
bruscamente, con fiebre, dolor, edema
del miembro afectado además de
compromiso del estado general
La
linfangitis involucra los vasos
linfáticos, produciendo la
inflamación de éstos y, como
consecuencia, dolor y síntomas
tanto generales como localizados.
Por lo
general, la linfangitis es producto de
una infección aguda de la piel por
estreptococos o por estafilococos y se
puede presentar a partir de un absceso o
lastimadura en la piel o los tejidos
blandos.(Erisipela) La linfangitis
puede ser indicio de que hay una
infección en progreso, lo cual debe ser
motivo de preocupación debido a la
diseminación de la bacteria al torrente
sanguíneo que, a su vez, puede ocasionar
infecciones potencialmente peligrosas.
Son muy
frecuentes en miembros
inferiores, cursan a veces, con fiebre,
malestar general; una variedad de ellas,
la reticular superficial, es muy
aparatosa; temperatura elevada 38° a 40°
C, postración, náuseas. La otra
variedad, la troncular superficial, es
menos agresiva y de tratamiento más
rápido.
Se deben a
contaminación por Estreptococo y
Estafilococo, como dijimos antes, que
"conviven" con nosotros, en nuestra
piel.
Con el
advenimiento de los antibióticos su
tratamiento es rápido y eficaz, pero hay
que encontrar el factor desencadenante,
ya que infecciones repetidas de los
vasos linfáticos curan con estenosis
(fibrosis) de ellos por la
cicatrización, dando lugar a un proceso
de linfedema secundario inflamatorio,
como secuela.
Cuando el
profesional que efectúa la consulta no
está entrenado, la linfangitis se puede
confundir con un coágulo en una vena
(tromboflebitis).
Linfedema
Los
miembros inferiores y superiores sufren
un aumento del volumen por alteración
de la circulación linfática. No cede con
el reposo y requieren un tratamiento
especializado
EL SISTEMA LINFÁTICO, COMO VÍA DE
DRENAJE
El sistema
linfático es una red microscópica de
capilares que se encuentran por todos
los tejidos, transcurriendo entre los
vasos arteriales y venosos.
Su función
es mantener un balance entre los
líquidos, es decir recuperar el exceso
de líquido intersticial, devolviéndolo a
la circulación general (unos tres litros
diarios aproximadamente), y además las
proteínas. Ese líquido, una vez dentro
de los vasos linfáticos, se denomina
linfa.
El sistema
linfático se halla conformado por los
capilares, ubicándose entre las células,
y por su unión dan origen a los
colectores y éstos a los vasos
linfáticos. De este modo, el líquido
intersticial, es decir el que perdieron
los vasos arteriales y venosos, es
succionado (linfangión, viene del
griego, significa succión) al interior
de los vasos linfáticos, no pudiendo
salirse nuevamente.
La red
linfática se halla en todo el cuerpo, a
excepción del Sistema Nervioso Central,
haciendo "estaciones" en los ganglios
linfáticos, dónde se "limpian" y se le
adicionan "linfocitos".
El sistema
linfático puede ser visualizado por
distintos estudios, destacándose entre
ellos la linfocintiografía
radioisotópica con limphofast, la que es
una macromolécula marcada con tecnecio
99, siendo radioopaca, inyectándosela en
un vaso linfático, permitiendo
visualizar su trayecto y velocidad de
absorción. Este estudio, es muy
importante para el tratamiento de
distintas afecciones linfáticas, como el
LINFEDEMA.
DESCRIPCIÓN
El
propósito de esta información es el que
UD. sepa:
· Qué es,
por qué ocurre, y cuáles son sus
factores de riesgo.
· Cómo se
diagnostica el linfedema.
· Métodos
de prevención y/o tratamiento.
El
linfedema es la acumulación de líquido
linfático en los tejidos. Esta situación
puede presentarse desde el nacimiento,
por una anomalía congénita, o posterior
a un traumatismo, o al tratamiento de
determinados tipos de cáncer, como ser
el de mama. Los vasos linfáticos pueden
ser seccionados durante la cirugía o
bloqueados durante el tratamiento
(cobaltoterapia), por infección o
cicatrices, o hasta el tumor mismo. Esta
situación suele presentarse en la región
inguinal (linfedema de miembro inferior)
o en la región de la axila (linfedema de
miembro superior), haciéndolo con o sin
dolor, en forma aguda o crónica,
inmediata a la cirugía o años después.
Son
factores de riesgo:
-Obesidad.
-Tratamiento radiante postoperatorio.
-Infecciones a repetición en el miembro
afectado.
El
diagnóstico se realiza por los síntomas
clínicos, es decir si Ud. nota que su
brazo o pierna comienza a hincharse y
que luego del reposo diario, al
levantarse y con el transcurso de los
días cada vez cede menos ese hinchazón,
tornándose a medida que pasa el tiempo
más y más duro, no dude en consultar a
su médico, según las circunstancias se
solicitaran los estudios pertinentes.
La
prevención comienza cuidando desde el
comienzo (post cirugía o radioterapia)
la piel, evitando cargar pesos, o el
recibir traumatismos tanto en brazo como
pierna, no permitir que se extraiga
sangre del miembro comprometido, no usar
corpiños con breteles de ese lado,
tampoco pulseras o cualquier elemento
que pueda perjudicarlo.
Otros
consejos útiles
-
Si
practica la jardinería, proteja su
brazo o pierna, evite realizar con
el mismo esfuerzos
-
Evite
depilar ese miembro, si debe hacerlo,
utilice una rasuradora eléctrica.
-
En las
tareas como el cocinar, utilice
guantes.
-
No se
corte las cutículas y mantenga la
higiene de sus uñas.
-
Evite
el extremo calor y frío
-
Evite
el trabajo prolongado y vigoroso,
con el brazo o pierna afectados.
-
Broncéese gradualmente y utilice
filtro solar.
-
Evite
la presión constrictiva de la pierna
o brazo.
-
Lleve
su bolso o cartera con el brazo
sano.
-
Consulte inmediatamente ante
cualquier signo de infección.
En el
tratamiento del linfedema es importante
verificar el grado de fibrosis que
presenta el miembro afectado, es decir
su evolución, para hablar del tipo y
tiempo de tratamiento. Lo habitual es
realizar el drenaje linfático manual, el
que modifica la dirección del líquido
linfático de las áreas bloqueadas hacia
vasos sanos y funcionales, de forma
intensiva por 21 a 28 días, evaluando su
evolución y contemplando la posibilidad
quirúrgica, para ayudar a que los
resultados sean lo más persistentes
posibles.
Es decir el
tratamiento tiene dos estadíos:
-
Médico, dado por el drenaje linfático
manual,
-
Quirúrgico, y la correcta combinación de
ambos.
Finalmente,
conseguido el objetivo, se ingresa en la
fase de mantenimiento, la que será
indicada por el médico.
Pie
diabético
Son las
lesiones ocasionadas por las
alteraciones metabólicas en
pacientes con diabetes, son
multisistémicas, esto quiere decir
neurológica, vascular y
osteoarticular y, si no es
precozmente diagnosticada, conlleva
a un elevado porcentaje de
amputaciones con grave repercusión
personal, laboral, familiar y
económica para el paciente como
así también en los ámbitos
sanitarios asistenciales y sociales
La combinación de la neuropatía
periférica, (alteración de la
sensibilidad) la enfermedad
arterial periférica, y las
anormalidades mecánicas pueden
llevar a la deformación del pie, a
la infección y al desarrollo de las
úlceras.
Se debe evitar el mal control de la
diabetes, los factores de riesgo
como el tabaquismo, la hipertensión
arterial, las dislipemias, etc.
Se pueden desencadenar lesiones por
traumatismos internos o externos,
los primeros se producen por
alteraciones de los puntos de apoyo
del pie y la modificación de la
almohadilla plantar en cantidad,
calidad o por desplazamiento,
desprotegiendo la cabeza de los
metatarsianos. Y los segundos se
pueden evitar con una buena
educación de los pacientes y la
observación diaria de los pies..
Hay que evitar la aparición de
lesiones como callos, ampollas,
edema, descamación, dermatitis, etc.
ya que luego aparecen la úlcera, la
infección, la necrosis.
Nuestro objetivo es crear las
condiciones necesarias para la
realización de un diagnóstico
adecuado y un tratamiento oportuno.
Todas las fotos mostradas son de
carácter médico únicamente
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